María Montessori fundó la primera “Casa dei Bambini” en 1907 en Roma. Es una casa especialmente dedicada a los niños de las familias menesterosas.
El concepto y la estructura de las casas de niños, se corresponde con las distintas fases de desarrollo de los niños (De 2 a 6 años de edad) y les ofrece los impulsos de aprendizaje que están adecuados con las sensibilidades de cada frase.
El día está estructurado en distintas fases: los niños hacen algunos juegos autónomo, otras actividades individual o en común y además diferentes juegos de movimiento.
Existen actividades artísticas y juegos que estimulan la fantasía y la lengua así como diferentes materiales de matemáticas. Por lo demás los niños hacen actividades de la vida cotidiana: los niños encienden una vela y después la apagan.
La variedad de los materiales es otro aspecto fundamental en la pedagogía de Montessori. Los materiales deben apoyar el desarrollo infantil y deben estimular los cinco sentidos. Por eso en las casas de los niños trabajan con distintos tipos de materiales: con cajas de ruido (en una caja hay piedras, en otra arena,…), con diferentes estructuras para palpar (liso, áspero, madera, arena) o con estructuras geométricas.
Al mismo tiempo los maestros deben apoyar la adquisición de lenguas cuando se trabajan con los materiales. María Montessori desarrolló un método que consiste de tres etapas:
1. La asociación de la percepción sensorial con el nombre del objeto o de la característica: el niño recibe dos colores. El maestro dice: “Esto es rojo, eso es azul.”
2. El niño reconoce la característica que está adecuada con el nombre: El maestro dice: “Dame rojo, dame azul”
3. El niño recuerda el objeto: El maestro muestra al niño el objeto y preguntan “¿Qué es esto?” El niño responde: “Este es rojo, eso es azul”.
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